Apenas unos días después del desembarco de Elorduy, el Athletic estrenó sus flamantes uniformes nuevos en Irun en un amistoso que perdió 2-0 y que no mereció más que unas líneas en la prensa de la época. De hecho, no es la primera vez que Carlos y sus amigos recogen a un desconocido como si fuese famoso. Todo lo contrario. Atendiendo a los periódicos de la época, el cambio no supuso nada en un deporte incipiente sin todavía un apego a los colores como seña de identidad de un equipo, ciudad o región.