Además, los futbolistas germanos estaban en buenas condiciones físicas, mientras que los jugadores argentinos llegaron a la final acarreando varias lesiones, incluyendo a Maradona, que seguía necesitando infiltraciones en el tobillo izquierdo. Pero ya en los octavos de final se enfrentaría a su clásico rival, Argentina de la mano del astro Diego Armando Maradona, donde caería por un marcador de 0:1 con un gol de Claudio Caniggia en el minuto 80, tras una gran jugada de Maradona que se llevó a dos y soltando el pase dejando solo a su compadre.